EL MILÁN SE DESQUITA CON GOLES

7ª JORNADA

MILÁN 3-0 PALERMO

El Milán ha vuelto a la sendera del triunfo, tras la derrota sufrida hace quince días contra la Juve. Los de Allegri con el triunfo se colocan con ocho puntos en la zona media de la tabla, mientras que el Palermo con 10, se mantiene en posiciones europeas.

El Palermo de Mangia distó mucho del visto durante toda esta campaña. Un equipo flojo en defensa, temeroso y sin ideas en el mediocampo y sin peligro en ataque. Por su parte el Milán hizo muy poco, pero consiguió mucho.

Al descanso, el Milán ganaba gracias a un gol de Nocerino. El centrocampista italiano que remató solo en el área pequeña, una dejada de cabeza de Aquilani a centro de Ibrahimovic, no quiso celebrar el tanto anotado al que fue su equipo hasta este verano.

La mala noticia para el Milán, estuvo en la lesión de Thiago Silva a los 34 minutos del primer tiempo y que le hará ser duda para el partido de Champions de esta semana, que medirá a los rossoneros con el Bate Borisov.

El brasileño, podría sumarse así a los ya lesionados Gatusso, Seedorf, Mexes, Ambrosini o Pato. En el Milán, sigue faltando la lucidez en el mediocampo y la figura de un jugador que de criterio y salida al juego del equipo. Por eso, todo el peligro y la pegada del Milán sigue recayendo en los de arriba.

Ibrahimovic y Cassano, con la ayuda del recuperado Robinho, que hoy volvió al equipo tras dejar atrás su lesión, el Milán gana en desborde, toque y precisión arriba. El brasileño fue muy importante para que los tres puntos se quedaran en San Siro.

Suyo fue el segundo gol del encuentro, anotado a los diez minutos del segundo tiempo, tras definir a la perfección con un sutil toque, un gran pase de Ibrahimovic, que rompió a la zaga rosanera.

Nueve minutos después, llegaría la sentencia del Milán, con el tanto de Cassano, que remataba en el punto de penalti un balón de Abate. De ahí al final del partido, los locales se limitaron a controlar el partido sin arriesgar, mientras que el Palermo nunca dio sensación de poder llegar con peligro a la portería de Abbiati, que hoy pasó desapercibido.

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